Lo más triste, Miguel, es que no suele haber un criterio más sólido que ese. Los gestores de las empresas a veces muestran un dudoso nivel de competencia. Me encantan los breves tan agudos que escribes. Un abrazo Juan M
En estos tiempos somos tan prescindibles que los criterios no suenan nada descabellados. Una vez más la realidad supera a la ficción. Besos van que me voy al cuento que sigue. San Montelpare
Hola Juan Manuel! Ya sabes como son los corporativos, cuando quieren despedir a alguien se agarran de lo que sea. Muchas gracias por tus comentarios, un abrazo.
En estos tiempos de locura y sobre todo en países en los que el tema laboral es delicado, el criterio está de vacaciones. Te alcanzo en el otro cuento. Beso grande San!
Lo más triste, Miguel, es que no suele haber un criterio más sólido que ese. Los gestores de las empresas a veces muestran un dudoso nivel de competencia.
ResponderEliminarMe encantan los breves tan agudos que escribes.
Un abrazo
Juan M
En estos tiempos somos tan prescindibles que los criterios no suenan nada descabellados. Una vez más la realidad supera a la ficción.
ResponderEliminarBesos van que me voy al cuento que sigue.
San Montelpare
Hola Juan Manuel!
ResponderEliminarYa sabes como son los corporativos, cuando quieren despedir a alguien se agarran de lo que sea.
Muchas gracias por tus comentarios, un abrazo.
En estos tiempos de locura y sobre todo en países en los que el tema laboral es delicado, el criterio está de vacaciones.
ResponderEliminarTe alcanzo en el otro cuento.
Beso grande San!