22 de septiembre de 2024

Cambio de Costumbres



Por culpa de los conquistadores españoles ahora tenemos que ir a misa los domingos en vez de continuar con la bonita tradición de ir a las pirámides a sacrificar personas.

14 comentarios:

  1. Mucho más divertida esa tradición que interrumpimos los cabrones y entrometidos españoles.
    Un abrazo.

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    1. Hola Chema.
      No es para tanto, ya sabes como es mi blog... en ésta entrada el sarcasmo se cuenta solo.
      Un abrazo.

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    2. El sarcasmo está también en el comentario.

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    3. Lo entiendo Chema pues tienes un gran sentido del humor, desafortunadamente hay paisanos tuyos que no lo toman tan de buena gana.
      Un abrazo.

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  2. Pues para muchos, asistir a la iglesia un domingo es un sacrificio en sí, igualmente. Va un abrazo, Miguel.

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    1. Jajajajaja buena reflexión, es prácticamente lo mismo con la diferencia de que ahí no te permiten ofrendar al sacerdote.
      Un fuerte abrazo Julio David.

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  3. Jajajaaaaa
    A lo de sacrificar a algunos me apuntaría, jajjaajaja

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    1. Jajajajaja, igual yo.
      Imagina la alegría que le daría a Terremoto Crazy haber vivido en esa época, sin duda se apropiaría del título del sumo sacedote para darle mate a quien le pongan enfrente.
      Un abrazo Xavi.

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  4. Jajajajaja. Bueno, en lo de ir a misa es el sacrificio de uno mismo. Al menos, en las pirámides eran otros los sacrificados...

    Besos, Miguel

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    1. Jajajajaja, además resultaba más divertido ver el espectáculo en una piramide que oir a un señor hablar por horas en una iglesia.
      Muchos besos de regreso preciosa.

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  5. jajajaj una desgracia para los amigos de aquellas tierras.
    Por aquí los querandíes y charrúas ni se interesaban en levantar pirámides ni nada. Te liquidaban así nomás, en plena llanura de la Pampa Húmeda

    Abrazos

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    1. Jajajaja. Muy bien, como debe ser, sin tanto rodeo ellos a lo que iban.
      Un abrazo Frodo.

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  6. La necedad, el error, el pecado, la tacañería,
    Ocupan nuestros espíritus y trabajan nuestros cuerpos,
    Y alimentamos nuestros amables remordimientos,
    Como los mendigos nutren su miseria.

    Nuestros pecados son testarudos, nuestros arrepentimientos cobardes;
    Nos hacemos pagar largamente nuestras confesiones,
    Y entramos alegremente en el camino cenagoso,
    Creyendo con viles lágrimas lavar todas nuestras manchas.

    - Charles Baudelaire

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  7. Hola Alexander.
    Bastante profundos los escritos de Baudelaire, no lo conocía pero lo estudiaré más.

    Abrazo.

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