de un tipo con buenos principios e impredecibles finales
20 de enero de 2021
Discreción viral
Esto de usar cubrebocas es fantástico. Además de protegernos y en tanto ningún loco nos escuche, podemos hablar por horas y horas con nuestros amigos imaginarios sin sufrir críticas ni interrupciones.
¡Me puedo imaginar la pachanga que se arman todos los días! Llevas integrado tu propio FaceBook Toro, jajajaja. Como siempre un gusto enorme que seas tú quien escriba.
¡Muy cierto! Esas son otras bonitas cualidades que poco se toman en cuenta al momento de usar cubrebocas. A los chimuelos también les viene de maravilla.
En tu caso ni el maquillaje ni el labial son necesarios pues guapa ya eres de manera que me decanto por el mero uso antiviral que das al cubrebocas. Gracias por el comentario y la visita Mucha.
Y que lo digas. Conozco personas que se lo quitaron un momento para beber agua y hasta los amigos imaginarios los abandonaron. Del susto corrieron despavoridos.
Jajajaja seguro piensan que hablas con un amigo imaginario y entonces el hecho se justifica. Si pones atención verás que la gente tiene ya más amigos imaginarios que reales.
Muchos besos de regeso Auro, feliz inicio de semana.
¡Tienes razón! Ahora que empieza el frio otra bondad le has descubierto a los cubrebocas. Además son prendas de lujo, cuidado y te va saliendo más caro un cubrebocas de marca que una chamarra de plumas.
Jajajaja no lo sé Macondo, es más, no se como pude vivir tanto tiempo sin usarlo. A mi no me importa, una vez terminada la pandemia lo seguiré usando y si me critican, pues estudio medicina para estar justificado.
La cantidad de amigos imaginarios es directamente proporcional a la cantidad de cubrebocas que uno posea (que tal mi ley, eh, jajajaja). Me da mucho gusto pues así el confinamiento se lleva mejor.
Jajajaja quédate tranquila que seguramente era un piropo y si no, quien te lo dijo es tonto(a) y/o envidioso(a). Ves, por eso prefiero a los amigos imaginarios.
Y podemos bostezar de aburrimiento sin que se note... tanto (que los ojos también bostezan). Y al que le huele el aliento, el castigo le viene impuesto mientras libera al prójimo del mismo.
Jajajaja definitivamente. ¡Otra ventaja! Caernos de sueño por la calle sin que nadie se dé cuenta. Además, se debe procurar un buen estado bucal porque la halitosis, enmascarados, es peor que el Covid mismo... para desgracia del afectado, claro.
Jajajaja cierto. Yo ya me decidí, cuando la pandemia pase estudiaré medicina para seguir usándola sin que nadie me vea raro, ni mis amigos imaginarios.
Haz la prueba y verás que grata sorpresa. Para como están las cosas, no hay nada mejor que un grupo de amigos imaginarios que te acompañen todo el día, además de seguro, son más divertidos.
Es el momento de los mejores amigos imaginarios, a saber hasta cuándo podemos tener este privilegio...
ResponderEliminarUn saludo.
Pues por lo que veo vamos para un rato más. Mi FaceBook virtual tiene más amigos imaginarios que el original, con eso te digo todo.
EliminarUn abrazo.
Nosotros estamos muy contentos.
ResponderEliminarSomos más de mil dentro del cuerpo de Toro Salvaje.
Hoy me tocó escribir a mí.
Saludos.
¡Me puedo imaginar la pachanga que se arman todos los días!
EliminarLlevas integrado tu propio FaceBook Toro, jajajaja.
Como siempre un gusto enorme que seas tú quien escriba.
Saludos.
jaja, es ideal para disimular papada, no usar bufanda y para los feos con ojos bonitos :-)
ResponderEliminarUn abrazo
¡Muy cierto! Esas son otras bonitas cualidades que poco se toman en cuenta al momento de usar cubrebocas. A los chimuelos también les viene de maravilla.
EliminarUn abrazo Albada.
Para mi es fantastico no gasto en maquillaje y me he dejado de poner mi rojo labial oscuro...
ResponderEliminargenial tu entrada
En tu caso ni el maquillaje ni el labial son necesarios pues guapa ya eres de manera que me decanto por el mero uso antiviral que das al cubrebocas.
EliminarGracias por el comentario y la visita Mucha.
Un beso.
Y hay personas a las que les favorece no saben cuánto.
ResponderEliminarFuerte abrazo.
Y que lo digas. Conozco personas que se lo quitaron un momento para beber agua y hasta los amigos imaginarios los abandonaron. Del susto corrieron despavoridos.
EliminarUn abrazo Pitt.
Ya te digo... ya no me miran raro en el súper cuando yo misma me pregunto por los productos que no encuentro, jijiji.
ResponderEliminarMil besitos, Miguel y muy feliz día.
Jajajaja seguro piensan que hablas con un amigo imaginario y entonces el hecho se justifica. Si pones atención verás que la gente tiene ya más amigos imaginarios que reales.
EliminarMuchos besos de regeso Auro, feliz inicio de semana.
Poco a poco, nos vamos acostumbrando a llevarlas. Ahora nos coge en invierno y apetece abrigarse más...lo malo fue en verano con 40º o más.
ResponderEliminarBesos
¡Tienes razón! Ahora que empieza el frio otra bondad le has descubierto a los cubrebocas. Además son prendas de lujo, cuidado y te va saliendo más caro un cubrebocas de marca que una chamarra de plumas.
EliminarBesos.
Menudo invento. No sé por qué se queja la gente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Jajajaja no lo sé Macondo, es más, no se como pude vivir tanto tiempo sin usarlo. A mi no me importa, una vez terminada la pandemia lo seguiré usando y si me critican, pues estudio medicina para estar justificado.
EliminarUn fuerte abrazo.
De esos tengo muchos, je,je.
ResponderEliminarUn saludo 😀
La cantidad de amigos imaginarios es directamente proporcional a la cantidad de cubrebocas que uno posea (que tal mi ley, eh, jajajaja). Me da mucho gusto pues así el confinamiento se lleva mejor.
EliminarUn abrazo.
Hace poco me dijeron: "¡Qué bien te queda la mascarilla!". Sonaba a piropo, pero me temo que no lo era, jajaja.
ResponderEliminarBesos
Jajajaja quédate tranquila que seguramente era un piropo y si no, quien te lo dijo es tonto(a) y/o envidioso(a). Ves, por eso prefiero a los amigos imaginarios.
EliminarBesos bonita.
Y podemos bostezar de aburrimiento sin que se note... tanto (que los ojos también bostezan).
ResponderEliminarY al que le huele el aliento, el castigo le viene impuesto mientras libera al prójimo del mismo.
Jajajaja definitivamente. ¡Otra ventaja! Caernos de sueño por la calle sin que nadie se dé cuenta. Además, se debe procurar un buen estado bucal porque la halitosis, enmascarados, es peor que el Covid mismo... para desgracia del afectado, claro.
EliminarUn abrazo Patricia.
Los que tenemos las neuronas un poco machacadas será mejor no quitarnos nunca la mascarilla.
ResponderEliminarUn saludo.
Jajajaja cierto. Yo ya me decidí, cuando la pandemia pase estudiaré medicina para seguir usándola sin que nadie me vea raro, ni mis amigos imaginarios.
EliminarUn abrazo Ángel.
Nunca lo había pensado, quizás sea este el momento de tener un amigo imaginario que nos acompañe siempre. Qué bonito.
ResponderEliminarHaz la prueba y verás que grata sorpresa. Para como están las cosas, no hay nada mejor que un grupo de amigos imaginarios que te acompañen todo el día, además de seguro, son más divertidos.
EliminarUn beso Manuela.
tus textos son bien narrados escritos sentidos me encantan te dejo un abrazo desde mi casa
ResponderEliminarTienes toda la razón, aún en esos casos la sana distancia debe aplicarse rigurosamente, uno nunca sabe de que lado puede pegársele el bicho.
ResponderEliminarAbrazo Julio David.
Me quito el cubreboca para agradecer tus palabras.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.